Lo vivido este domingo en La Cañada Shopping fue muy criticado en las redes sociales. Los promotores y responsables del evento convirtieron en plató de Telecinco el lugar con Kiko Rivera, Omar Montes, Luis Rollán y Fani Carbajo como los Reyes de Oriente.
Fueron muchas personas las que alentaron a la Policía para que se personase en el centro comercial marbellí, algo que terminaron haciendo para paralizar el acto.
"¿Cómo en plena pandemia dejan montan este pollo de gente?", exclamaba Javier Ridruejo, que cogía a sus hijos a toda prisa para sacarlos del centro comercial asustado. "Serán Melchor, Gaspar y Baltasar con las ropas de estos payasos los que nos traigan la tercera ola del Covid a Marbella".
Según el cartel que anunciaba el evento de Platea Galia Producciones, los Reyes Magos iban a estar en La Cañada realizando el evento en circuito cerrado, como consecuencia de la pandemia, sin público, pero luego no fue así. Retransmitiéndose en directo con el programa Viva la vida de la cadena de televisión Telecinco.
El dueño del complejo es Tomás Olivo, "el rey de los centros comerciales". Es el séptimo español más rico, con 1.800 millones de euros. Hace unas semanas organizó el alumbrado navideño de sus instalaciones dando las gracias a los héroes de este 2020 con un acto en el que asistieron los representantes las Fuerzas de la Seguridad del Estado de la ciudad. Sin embargo, ahora las críticas están siendo demoledoras para el conocido empresario.
Anabel Cuevas pedía: "Soy una sanitaria del Hospital Costa del Sol. Por favor, que el dueño de la cañada, si tiene vergüenza quite, el eslogan de 'GRACIAS HÉROES' de detrás, que es un insulto hacia nosotros, aprobando el acto que han permitido hoy".
Los integrantes del evento salieron del centro una vez terminado el evento. Todo se paralizó cuando ya casi había terminado. El mal ya estaba hecho.
El centro comercial ha emitido el siguiente comunicado: "Desde la Cañada Shopping queremos transmitir nuestras más sinceras disculpas ante todos los ciudadanos. En la convocatoria del evento señalaba claramente que era un evento sin público retransmitido por nuestras redes sociales".
"Debido a la popularidad de los integrantes no se han podido cumplir las medidas sanitarias impuestas por el centro comercial por el comportamiento de algunos fans y se ha tenido que suspender el evento, ya que no se respetaba la distancia de seguridad marcada por las medidas sanitarias. Por lo tanto, la Cañada Shopping se ha visto obligada a interrumpir cancelar el evento antes de lo previsto para garantizar la seguridad de sus clientes", continúa la misiva.
Gracias a las imágenes que se han difundido por parte de los visitantes, y que emitían en directo por redes sociales, se vio el caos en el centro.