Unos 320 niños y adolescentes murieron cada día por causas relacionadas con el VIH/sida en 2018, es decir, 13 cada hora, según un nuevo informe de Unicef.
La causa principal de estas muertes fue el bajo índice de acceso a tratamiento antirretroviral, así como las escasas tareas de prevención: en 2018 solo el 54% de los niños de 0 a 14 años que tenían sida recibieron terapia antirretroviral vital.
“El mundo está a punto de alcanzar grandes logros en la batalla contra el VIH/sida, pero no podemos dormirnos en los laureles con lo ya obtenido”, aseguró este martes la directora ejecutiva de Unicef, Henrietta Fore. “Garantizar el acceso a pruebas y tratamientos adecuados a niños y adolescentes es una cuestión de vida o muerte. Y para ellos debemos, siempre, elegir la vida”, agregó.
Los datos muestran profundas desigualdades a nivel regional cuando se trata del acceso a tratamiento por parte de los niños con Vih. Este acceso es alto en Asia Meridional (91%), seguido de Oriente Medio y África del Norte (73%), África del Este y del Sur (61%), Asia Oriental y Pacífico (61%), América Latina y Caribe (46%) y África Central y del Oeste (28%).
El acceso de las madres a terapia antirretroviral para prevenir la transmisión del virus a sus bebés ha aumentado a nivel global y alcanza el 82%, un 44% más que hace diez años, según el informe. Sin embargo, las desigualdades entre regiones persisten: África del Sur tiene las tasas de cobertura más altas (92%), seguida de América Latina y el Caribe (79%), África Central y del Oeste (59%), Asia Meridional (56%), Asia Oriental y Pacífico (55%), y Oriente Medio y África del Norte (53%).
“Aunque tenemos un largo camino por delante, proporcionar el tratamiento antirretroviral a cada vez más madres para prevenir la transmisión madre-hijo ha contribuido a prevenir unos dos millones de contagios del virus, y a evitar la muerte de más de un millón de niños menores de cinco años”, subrayó Fore. “Necesitamos un progreso similar en el tratamiento pediátrico. Reducir la brecha entre niños y madres podría aumentar significativamente la esperanza y la calidad de vida de los niños infectados con VIH”, concluyó.
Otros datos del informe revelan que en 2018 el número de niños de 0 a nueve años infectados por el VIH ascendió a 1,1 millones y que el embarazo o el parto fueron la vía de transmisión para 89.000 niños menores de cinco años y 76.000 contrajeron el VIH durante la lactancia. Otro dato relevante es que 140.000 niñas adolescentes contrajeron el VIH, frente a 50.000 adolescentes varones.
“El coste de fallar en las pruebas y tratamiento de los niños en riesgo de contraer VIH se mide en las vidas y en el futuro de los niños. Es un coste que la sociedad no puede permitirse. Es necesario actuar contra el sida para lograr una financiación y equipamiento integrales que permitan preservar, proteger y mejorar la calidad de vida de los niños en su primera y segunda década”, demandó Fore.