La alcaldesa de Madrid, Manuela Carmena, ha recibido esta mañana el alta hospitalaria, tras haber permanecido ingresada unos días por un conato de infección a causa de la operación de tobillo a la que había sido sometida la pasada semana. Carmena ha felicitado el año a los periodistas que la esperaban a la salida del Hospital de La Princesa y les ha manifestado su confianza en una pronta vuelta a su despacho.
“En cuanto pueda me incorporaré al trabajo”, ha asegurado mientras explicaba que el problema es la movilidad. “Tendré que aprender a manejar muletas porque, según me han dicho, no puedo apoyar el tobillo seguramente en tres meses. Estos días tengo que ir en silla de ruedas porque es lo que me han aconsejado. Pero eso no me impide trabajar”. De hecho durante su estancia hospitalaria reconoció no haber desconectado del todo. “He estado intercambiando WhatsApp con una vecina que tenía problemas en su barrio y me parece que se lo he solucionado”.
“Voy a hablar con los Reyes Magos para ver si me facilitan ser un poco maga y poder estar con ellos. Estamos en tratos”, ha declarado la alcaldesa al ser preguntada por su asistencia a la Cabalgata de Reyes, prevista para la tarde noche del día 5.
También ha relatado cómo ha sido este fin de año ingresada y ha agradecido al hospital las atenciones para que los pacientes pudieran disfrutar de esa noche en las mejores condiciones. “Ha sido una experiencia, también se puede tener una buena noche de fin de año gracias a los detalles del hospital”.
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