Entre los que se incluyen, por primera vez, 100 000 condones femeninos. Esta cifra representa un importante aumento con respecto a los Juegos de Londres de 2012, en los que se distribuyeron 150 000 condones a los deportistas.
Fábio Mesquita, director de la Secretaría de ETS, SIDA y hepatitis viral del Ministerio de Sanidad brasileño, señala que esta iniciativa forma parte de los esfuerzos por cumplir los objetivos de ONUSIDA. “Si el programa brasileño para luchar contra el SIDA es ahora una referencia mundial, con 730 000 pacientes registrados, se debe en gran parte a la labor de comunicación que realizamos, sobre todo en cuanto a medidas preventivas. Para impulsar nuestro trabajo, durante los Juegos queremos contribuir al objetivo de ONUSIDA y entregar una media de dos condones al día para cada deportista participante”, explica.
Se ha asegurado que el riesgo de contraer el virus de Zika durante los Juegos es bajo. La Organización Mundial de la Salud ha recomendado que quienes acudan a los Juegos tengan relaciones sexuales más seguras para evitar la transmisión sexual del virus mediante el uso sistemático de condones, o bien absteniéndose del sexo durante su estancia y durante al menos ocho semanas después de su regreso, particularmente si han experimentado síntomas del virus de Zika.