La certificación se ha realizado vía telemática después de que la jueza no haya podido viajar hasta Alicante debido a las medidas anti COVID-19. Han sido el alcalde Luis Barcala y la vicealcaldesa Mª Carmen Sánchez quienes han descubierto la Certificación del Guinness World Records.
El alcalde, durante el acto institucional que se ha desarollado en el Salón Azul del Ayuntamiento, ha reseñado que “esta iniciativa va a suponer un importante revulsivo económico para los sectores productivos más afectados por la pandemia. Además, trae consigo que Alicante se sitúe en el foco de atención internacional en estas diferentes, tradicionales y seguras Navidades”.
Barcala ha catalogado la consecución del Guinnes Worl Records como un hito “singular, que supone una ayuda importante para los artistas de hogueras, un soporte para el tejido productivo, una importante promoción turística de Alicante como destino seguro, y un inspirador del sentido de la esperanza”. El alcalde ha finalizado su intervención con un mensaje de aliento: “No perdamos el optimismo ni la esperanza”.
Este mismo acto ha contado con la presencia de representantes de los sectores comercial, turístico, hostelero y de restauración, entre otros, que desde el primer momento avalaron el proyecto como una forma de reactivar la economía local. Se trata de la Federación de Empresarios de Hostelería de la Provincia de Alicante (FEHPA), Asociación de Locales de Restauración y Ocio de Alicante (ALROA), Asociación de Restaurantes de Alicante (ARA), Federación de Comerciantes y Empresarios de Alicante (FECOEMA), Federación Alicantina de la Pequeña y Mediana Empresa (FACPYME), Asociación de Comerciantes, y Asociación Provincial de Hoteles de Alicante (APHA).
La visita a la “Sagrada Familia” estará ambientada con un espectáculo de luz, que iluminará el Nacimiento desde la base hasta la parte superior. Además, un sonido de 20.000 watios. Se podrá contemplar y escuchar desde las 18 a las 24 horas, hasta el 6 de enero.
El protocolo para optar al Guinness World Records ha incluido en las últimas semanas dos mediciones. La primera de ellas se realizó el 21 de noviembre en el propio taller del artista, José Manuel García “Pachi”. Allí fue el arquitecto Juan Francisco Galván, designado por el Colegio Territorial de Arquitectos de Alicante (CTAA) quien midió las tres piezas, sin que estuvieran ensambladas. Como testigos, Francisco Vinal y Francisco García, especialistas y técnicos en este tipo de mediciones. Al mismo tiempo, se remitió a la Oficina del Libro Guinness un vídeo del momento de la medición con imágenes del calibrado de los instrumentos utilizados y un informe técnico avalando esas medidas.
El pasado jueves, 26 de noviembre, se repitió ese mismo proceso en la Plaza del Ayuntamiento, con las piezas mayores -San José y la Virgen María, ya ensambladas-. Se volvió a emitir un nuevo informe en el que se constata que ambas mediciones son coincidentes.
La marca anterior se consiguió en Monterrey (México) en 1991. Las medidas combinadas de las figuras de San José, la Virgen María y el Niño Jesús midieron 28,58 metros en total. Ésta era la cifra que el Belén de Alicante debía superar.
Las mediciones previas de la “Sagrada Familia” -las realizadas en el taller de “Pachi” con las piezas sin ensamblar y las de la Plaza del Ayuntamiento, ya ensambladas- fueron las siguientes, según ha explicado la jueza:
San José: 18,10 metros de altura; 5,32 de ancho, y 3,38 de fondo.
Virgen María: 10,58 metros de altura; 3,47 metrros de ancho, y 4,45 de fondo.
Niño Jesús: 3,32 metros de altura; 3,32 metros de ancho, y 4,08 de fondo.
El total combinado, de acuerdo a la apreciación de la jueza, es de 56,025 metros.
Así, y para finalizar su intervención telemática, Lena Kulhmann ha anunciado que “tengo el honor de confirmar que el Ayuntamiento de Alicante ha batido el récord por Largest nativity scene figurines, las figuras del Portal de Belén más grande del mundo. Y ahora, son los nuevos poseedores del récord”.
Al calcular la altura del Belén Monumental de Alicante, hay que señalar que una persona de 1,70 metros llegaría a la altura del tobillo de San José. “Su semblante sobrio -explica Pachi- comparte con María una ternura en los gestos”.
Está, de rodillas, a la derecha del Niño. Su pose es de contemplación y adoración, con la cabeza ligeramente inclinada hacia él. El manto que lleva puesto sobre la cabeza “conlleva un gesto universal de modestia”. Con esta figura se busca “la expresión de la ternura y el reconocimiento hacia el Niño Dios”.
El Niño aparece recostado en un pesebre en el centro de la escena. Se le puede ver arropado para el frío “pero siempre con sencillez, gesto alegre y afable para recibir a todos los que se acercan a él. El artsta ha querido representar “la expresión jovial y cercana de los niños”.
San José, presenta una paleta de colores terrosos similar a las vestimentas hebreas. Porta, además, un turbante “símbolo de la esperanza” y detalles en dorado “alusivos a la solemnidad e importancia”.
El vestido de María ofrece una gama de colores trabajada en azules, símbolo de la pureza. Éstos se combinan con ropajes en blanco. También cuenta con detalles dorados.
Los colores blancos predominan en el Niño Jesús, ejemplo de pureza y júbilo, de acuerdo al criterio del artista. Se complementan con colores tierra y ocres para el pesebre.
La estructura interna del Belén Monumental es de tubo de hierro de 50mmx50mmx1,5mm. Está unida, mediante una soldadura a gas, para evitar imperfecciones en las juntas y una mayor duración. Toda ella, ha explicado Pachi, "unida con tornillos autobloqueantes que, una vez apretados, ya no se sueltan”. El total de kilos de hierro se aproxima al millar.
Otro de los aspectos a destacar es el aislamiento. Después de finalizadas, las figuras han sido protegidas mediante una sustancia química ignífuga que las protege de las inclemencias del tiempo, golpes y vandalismo.
El 60% de las figuras está hecho con poliestireno expandido autoextinguible, "que, por su facilidad para concebir volúmenes y su peso ligero, se utiliza habitualmente en esculturas", puntualiza el autor del Belén. Además, "en caso de un posible incendio, se apagaría automáticamente".
El estilo del Belén se basa en el Modernismo alicantino de principios del siglo XX. Toma como referencia a los escultores alicantinos Vicente y Daniel Bañuls -padre e hijo-, y José Gutiérrez, discípulo de este último. Así figura en la Memoria Descriptiva redactada por José Manuel García.
Vicente Bañuls es el autor de, entre otros, los monumentos dedicados a Maisonnave (1893), Canalejas (1916) y de la escultura “La Aguadora” (1918), situada en la Plaza de Gabriel Miró. Una de las obras más afamadas de Daniel Bañuls es la fuente de la Plaza de los Luceros (1930). José Gutiérrez, también afamado artista de hogueras, es el artífice del Monumento al Foguerer (1982), situado en la Plaza de España.