Virginia González | Jueves 17 de septiembre de 2020
¿Los años se van notando y no sabes cómo mantener la piel de la cara joven y sana el máximo tiempo posible?
Sí, uno de los sueños de todo hombre es mantener una piel joven y tersa pese a los continuos afeitados a los que la sometemos día sí y día también. Para ello, te vamos a dar algunos consejos. Apunta y al lío.
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Lo primero es realizar una buena limpieza facial con productos específicos para el rostro.
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Elige productos de textura ligera y poco grasos. Para controlar la grasa, eliminar células muertas y prevenir el vellos encarnados se puede utilizar gel exfoliante.
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El afeitado es mejor después de la ducha.
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Tras el afeitado es bueno utilizar productos calmantes, con efecto astringente y bactericida, que aporten frescor, cierren los poros dilatados y desinfecten las posibles heridas. El after-shave tiene como función la cicatrización, reepitelización, reposición del pH cutáneo, aportar asepsia y proporcionar bienestar a la piel agredida por el rasurado.
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El afeitado debe realizarse lentamente y en la dirección de crecimiento del pelo.
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Hay que cuidar la cuchilla de afeitar, y que siempre esté limpia y afilada para evitar irritaciones y rozaduras.
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Tras el afeitado, aclarar la cara con agua fría, para calmarla y cerrar posibles cortes pequeño y después aplicar la nutrición e hidratación.
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Sobre la hidratación, a veces los hombres creen que al tener una piel más grasa no la necesitan, pero también es necesaria para frenar el envejecimiento.
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Es importante mantener hábitos saludables como dejar de fumar, por ejemplo, que empeoran la calidad de la piel.
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La piel del hombre necesita también protección solar.
Pasos a seguir:
Limpieza: Seguir esta rutina por la noche, para evitar las prisas de primera hora de la mañana y seremos más concienzudos. Empezamos con una crema o gel de los que al mezclar con agua emulsionan y adquieren textura lechosa. Repartirmos la crema por cara, cuello y escote y masajeamos en círculos.
Retirada: Aunque lo más cómodo es enjuagar el rostro y aclararlo simplemente con ayuda de las manos, es más eficaz y placentero usar una toalla pequeña, humedecerla en agua templada y retirar con ella los restos de la crema o gel con suaves masajes.
Tonificar: Completa la limpieza, afina la textura, unifica el tono, lo reaviva y optimiza la receptividad a los tratamientos posteriores. Se aplica el tónico en un algodón.
Mascarilla: Imprescindible una vez cada 15 días, elimina impurezas, reduce el tamaño de los poros, aclara y unifica el tono, favorece la regeneración cutánea, activa la microcirculación, elimina marcas de cansancio. Se retira con abundante agua y se seca con una toalla.
Consumir con moderación: el contorno es un punto débil de los hombres y es esencial realizar un buen diagnóstico para determinar el producto adecuado y cómo aplicarlo. Se toma una pequeña cantidad de producto con el dedo anular, utilizar la cantidad correcta, el exceso es tan malo como no utilizar nada. Se aplica la crema con pequeños toquecitos y sin arrastrar en la ojera pero también en el hueso orbital y en los párpados.
Recordar la necesidad de hidratarse por la mañana para mantener la piel confortable y protegida con un producto que calme, revitalice, reequilibre, afine, refresque, evite rojeces y respete el equilibrio a pesar de las condiciones externas. Parece mucho, pero la clave es elegir la crema idónea.
Por la noche, regeneramos ya que la piel está en reposo y en proceso de repararse. La hidratante de día y la regenerante de noche se aplican igual: se va repartiendo con los dedos por frente, mentón, mejillas, nariz, cuello y escote. Si tiene barba no olvide incluir esta zona en el reparto y trabajar en ella.
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