La minería de criptomonedas sigue estando en entredicho por su alto nivel de contaminación. Ahora, una herramienta desarrollada por la Universidad de Cambridge permite conocer una estimación a tiempo real del consumo energético, que al escribir estas líneas se encuentra por encima de los 64 TWh. Una cifra que, a bote pronto, es superior a la de países como Suiza.
El alto coste energético de cada transacción vuelve a poner bajo el foco la idoneidad del criptomercado, y es que el Cambridge Bitcoin Electricity Consumption Index (CBECI) ha creado esta herramienta en un momento en el que nos llegan noticias desde diversos puntos del planeta, como Irán, donde se ha disparado el consumo de energía un 7% debido a esta práctica. El país subvenciona a sus ciudadanos la factura de la luz, por lo que no es de extrañar que las personas que se dedican a la minería de criptomonedas estén buscando este tipo de localizaciones donde su actividad les renta mucho más que en otros países.
Algunos expertos apuntan a que hacer una estimación concreta es muy complicado, puesto que cada minero usa diversos tipos de hardware y de fuentes de energía, entre las que destacan cada vez más las renovables.
Cabe recordar además otros estudios, como el de Electric Power Research, que reseñaba que el consumo de todas las tablets de Apple del mundo se elevaba por encima de 1,50 TWh al año, una cifra inferior a la del Bitcoin.