Un estudio reciente revela que la mayoría de los cráneos analizados en el ritual ibérico de los "caps enclavats" pertenecen a hombres nacidos fuera del poblado donde fueron encontrados. Esta investigación, liderada por la Universitat Autònoma de Barcelona y con la participación de la Universitat de Lleida, utiliza análisis isotópicos para determinar la dieta y el origen geográfico de los individuos. Los resultados indican que cinco de los siete cráneos analizados eran foráneos, lo que sugiere patrones complejos de movilidad humana en la Edad de Hierro en el noreste peninsular. Este hallazgo destaca la importancia de contar con mapas detallados del estroncio biodisponible para futuras investigaciones sobre la movilidad en la Prehistoria.
Un reciente estudio ha revelado que la mayoría de los cráneos analizados en el ritual ibérico de los caps enclavats, datados a finales del I milenio a.C., pertenecen a hombres que nacieron fuera de las comunidades donde fueron encontrados. Esta conclusión surge de un análisis isotópico llevado a cabo sobre restos esqueléticos provenientes de Puig Castellar, en Santa Coloma de Gramenet, y Ullastret. La investigación, que cuenta con la participación de la investigadora Ariadna Nieto Espinet, del Instituto Ramón y Cajal de la Universitat de Lleida (UdL), ha sido publicada recientemente en la revista Journal of Archaeological Science: Reports.
El estudio fue liderado por la Universitat Autònoma de Barcelona y contó con la colaboración de instituciones como la Universidad de Burdeos (Francia), la Universidad de Tübingen (Alemania), el Museu d’Arqueologia de Catalunya, el Museu Torre Balldovina y el departamento de Cultura de la Generalitat.
Los arqueólogos utilizan el análisis de isótopos estables para determinar aspectos como la dieta y el origen geográfico de los individuos. Esto se realiza mediante el estudio de elementos como el carbono, oxígeno y nitrógeno. En el caso específico de los iberos, quienes practicaban la cremación, los cabezas cortadas ofrecen una oportunidad única para obtener información sobre su estilo de vida durante la Edad del Hierro.
En este trabajo, se analizaron los isótopos de oxígeno (?¹?O) y estroncio (??Sr/??Sr) en siete cráneos vinculados a una práctica ritual que implica decapitaciones. Los isótopos de estroncio se incorporan en las dentaduras durante su formación, creando una especie de “instantánea” del lugar donde vivió un individuo en su infancia. La renovación celular ósea acumula firmas que indican las ubicaciones donde ha residido posteriormente. El análisis realizado ha permitido concluir que cinco de los siete individuos estudiados eran forasteros, mientras que solo dos eran locales.
Los resultados obtenidos proporcionan evidencia directa sobre los patrones de movilidad humana y su relación con el territorio durante la Edad del Hierro en el noreste peninsular. Rubén de la Fuente Seoane, primer autor del estudio, destaca que “esta diferenciación refleja una sociedad dinámica y compleja con importantes interacciones tanto locales como externas”.
Ariadna Nieto Espinet, investigadora del grupo ARQHISTEC-GIP en la UdL, enfatiza que este estudio subraya “la importancia de contar con mapas detallados del estroncio biodisponible”, lo cual podría facilitar futuras investigaciones sobre movilidad humana y animal en Prehistoria. Esta línea investigativa también está siendo desarrollada por su equipo en la zona occidental de Cataluña.
Cifra | Descripción |
---|---|
7 | Número total de cráneos analizados |
5 | Número de individuos foranos |
2 | Número de individuos locales |
El análisis isotópico realizado a restos esqueléticos de los cráneos iberos indica que la mayoría de los individuos analizados eran hombres nacidos fuera del poblado donde fueron encontrados, lo que sugiere patrones de movilidad humana en la sociedad ibera.
El estudio fue liderado por la Universitat Autònoma de Barcelona y contó con la participación de investigadores de varias universidades y museos, incluyendo la Universitat de Lleida, la Universidad de Burdeos y la Universidad de Tübingen.
Se analizaron los isótopos de oxígeno (?¹?O) y estroncio (??Sr/??Sr) para determinar el origen geográfico y aspectos relacionados con la dieta de los individuos analizados.
Los resultados del estudio proporcionan evidencia directa sobre los patrones de movilidad humana en la Edad del Hierro en el noreste peninsular, reflejando una sociedad dinámica con interacciones locales y externas significativas.
El estudio destaca la necesidad de contar con mapas detallados del estroncio biodisponible, lo que puede favorecer futuras investigaciones sobre la movilidad humana y animal en la Prehistoria, especialmente en Cataluña.